Parece que los comedores escolares se han convertido en el "juguete" que todos los gobiernos utilizan como moneda de cambio, quizás para ganar votos o quizás para ponerse medallas sobre "la buena gestión" realizada. Desde los "comedores de verano", pasando por los eco-comedores, después por los comedores "insitu"hasta hoy que llegamos a los comedores con "menú único". Ninguna de esas "estupendas" ideas sirven para solucionar el problema real de los comedores. Y es que de nada sirve todas esas "buenas intenciones", sin escuchar a las direcciones de los centros, a las familias o a los trabajadores y trabajadoras de los propios servicios de comedores de los centros públicos de canarias, así como a los y las representantes de éstos.
El STEC-INTERSINDICAL CANARIA, lleva años reivindicando una ampliación de plantilla para bajar la ratio (actualmente en 1 auxiliar por cada 25 alumnos de infantil y 1 auxiliar por cada 35 alumnos de primaria), y para que de manera progresiva se implante la gestión directa en aquellos centros que tienen cocina pero la utiliza la empresa privada, esto abarataría la cuota que abonan las familias mensualmente.
Lo cierto es que la última "idea" de este gobierno sobre el menú único, nos parece una manera que beneficia más a las empresas que llevan la gestión de catering que a los usuarios y familias que usan el servicio. Como bien apuntaban las familias en su comunicado del pasado 4 de abril, los comedores escolares ya poseen una guía de dieta saludable en la que colaboraron Sanidad y Educación, además fue coordinada por el Servicio de Promoción de la Salud y participaron una veintena de expertos y expertas en nutrición y dietética y distintas asociaciones y federaciones de asociaciones de padres y madres, además de la Asociación de Celíacos y Sensibles al Gluten, la Asociación para la Diabetes de Tenerife o la Unidad Salmantina de Trastornos Alimentarios.
Para el STEC-INTERSINDICAL CANARIA, no cabe otro tipo de gestión que no sea la GESTIÓN DIRECTA DE CALIDAD con empleados públicos que garanticen la calidad del servicio (actualmente se encuentran realizando cursos de formación) y que sean gestionados por la propia consejería. Todos sabemos que el fin de la gestión privada es la obtención de beneficios. Estos beneficios son abonados mensualmente por las familias, las cuales en alguna ocasión y por el elevado importe de la cuota deben prescindir del servicio de comedor, complicando así la conciliación de la vida laboral y familiar.
Canarias (donde el sobrepeso afecta al 25,15% de la población de 2 a 17 años, según un estudio de la Universidad de Murcia) es la segunda comunidad española con más obesidad infantil y ojalá al final de la legislatura podamos aplaudir la gestión de aquel gobierno que haga que los comedores escolares cumplan la misión que deben realizar en canarias. Para el STEC-IC la fórmula no está en el "menú único", está en un servicio con alimentos de calidad donde el alumno y alumna comensal salga bien nutrido y el comedor sea a la vez un espacio de educativo.